Bioingeniería aplicada a la Arquitectura
Techo, tanque de agua y calefón solar al mismo tiempo
“Es una contribución más a la arquitectura sustentable, tendiente a lograr el ahorro energético global”, nos cuenta Chicho Oliva, vecino y arquitecto inventor, para describirnos su última producción.
La escasez progresiva de las fuentes energéticas tradicionales no renovables, incentivan el ingenio humano, pues los costos de dichas energías aumentan día a día.
A corto plazo, desaparecerán las fuentes de petróleo y gas. Por tal motivo, el mundo se ve en la necesidad de suplantar el uso de energías fósiles por fuentes de energía que sean renovables.
Es notable el esfuerzo que se realiza día a día, pues se incrementa el uso de estas variables energéticas sustentables, como son la utilización del viento a través de generadores eólicos, o el uso de energía solar a través de paneles solares.
En este sentido, FIBROESTRUCTURAS.COM, una empresa mendocina de Investigación Aplicada, propone una alternativa diferente: construye un techo o cubierta de tamaño variable, que funciona como tanque de agua y a la vez, puede acumular agua caliente que es calentada por el sol.
Cómo funciona
Consiste en el aprovechamiento de la energía del sol -energía solar térmica o energía termosolar- para producir calor, utilizable para cocinar o para calentar agua destinada al consumo doméstico, ya sea para uso sanitario o como calefacción.
Este techo acumulador de tan solo cuatro centímetros de espesor, contiene alrededor de 350 litros de agua caliente.
Si al agua acumulada en el techo se la deriva a un calefón termo convencional, entraría el agua precalentada y no sería necesario calentar el agua desde la baja temperatura que viene por la red. Con este procedimiento, se disminuiría el consumo de gas de la vivienda, destinado al calentamiento de agua.
Reciclando botellas plásticas
Este panel de techo acumulador de agua caliente solar, es fabricado en poliéster reforzado cuyas resinas se obtienen de las botellas de PET recuperadas. Al poliéster reforzado se lo combina con otros materiales de origen vegetal y por lo tanto renovables, dando como resultado un material sustentable denominado PRFTR®.
Con un peso por metro cuadrado de aproximadamente 10 kilogramos, hace que su colocación sea sumamente sencilla, pues no es necesario utilizar ningún tipo de grúa para colocarlo en su sitio.
Se lo atornilla a la estructura o a los muros, sin necesidad de colocar vigas, tirantes o correas en su superficie para que lo sostengan, pues es autoportante.
Su recubrimiento de resinas de colores gel-coat, permite variar el calentamiento del agua de su interior: pintadas con resinas más claras, menos elevadas serán la temperaturas del agua en su interior; pintadas con resinas más oscuras, mayor posibilidades de elevar la temperatura del agua en su interior. En este caso el panel es traslúcido, para una mejor iluminación de la caja de escalera.
También se lo puede utilizar como panel aislante de doble pared con cámara de aire.
“Hoy en día, con los polímeros –plásticos de origen natural- está ocurriendo lo mismo que sucedió durante la revolución industrial con los vidrios o el hierro, no se conoce su verdadera aplicabilidad y potencial “- cuenta Chicho y nos explica más acerca de estas combinaciones poliméricas, que ya son ciento por ciento sustentables, pues ya se obtienen de productos orgánicos, como por ejemplo, de la cáscara de la avena.
“Como verán, la utilización de productos derivados del petróleo, ya es historia. De todas maneras, el problema de utilizar derivados del petróleo, es cuando se lo quema como combustible -efecto invernadero- y no cuando se lo utiliza como un componente arquitectónico, que puede durar más de 50 años y que utiliza en su fabricación muchísimas menos unidades de naturaleza como las utilizadas para fabricar ladrillos o aluminio. La gran ventaja que tiene sobre el hierro es que las estructuras son más resistentes que el acero, no se oxidan y son muchísimo más livianas que los vidrios”.
“Este producto de bío-ingeniería, surge de una clara imitación de la naturaleza, pues su geometría responde a un orden natural similar a las laminillas estructurales que conforman el interior del hueso metacarpiano de un ala de buitre”.
Arquitecto Alejandro Luis Oliva, (a) Chicho.
Investigador Independiente del DICYT – Departamento de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Universidad de Mendoza.
Prof. de la Cátedra de Arquitectura – FAUD.
Asesor Especial de Tesis en Estructuras Laminares de la FAUD – Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Mendoza.
Titular de Fibroestructuras.com
Especialista en PRFTR – Poliéster Reforzado Fibrotensoreticular.
Mayor información: www.fibroertructuras.com o fibroestructuras@hotmail.com.



